Ortografía - Usos de por qué y porqué

Estoy seguro de que muchos de vosotros conocéis a la perfección la distribución de por qué y porqué, pero nunca está de más recordar los contextos en que debemos usar uno u otro, ya que estos se encuentran claramente delimitados y veo constantes dudas y titubeos en las redes sociales. Os explico. Ya veréis como aprendéis alguna cosa que desconocíais. [En otra ocasión os hablaré de la distribución de los usos de porque y por que; todo a su tiempo].

Usos de por qué:

Está compuesto por la preposición por y el interrogativo (pronombre o determinante según los casos) qué. Se usa, por tanto, en oraciones interrogativas y exclamativas en los contextos que os expongo:

a) Oraciones en las que se pregunta por la causa de algo:

¿Por qué no vienes a vernos?

¿Y por qué no te levantas tú a cerrarla?

También en oraciones interrogativas indirectas:

Me preguntó por qué no quería hoy té.

No entiendo por qué tienes que utilizar ese desodorante apestoso.

Pues explícale por qué lo dejas y ya está.

b) Oraciones interrogativas para indicar sugerencias (es frecuente seguido de negación):

¿Por qué no te callas?

¿Y por qué no vienes con nosotros y así te despejas?

c) En interrogativas o exclamativas con valor no causal (en los casos que siguen):

¿Por qué ventana entró el pájaro?

Si supieras por qué caminos transita a diario.

¡Por qué poco te vendes, nena!

Usos de porqué:

Se trata de una sola palabra, correspondiente con un sustantivo masculino equivalente a 'causa' o 'razón', de modo que, como los sustantivos, puede adquirir morfema de plural y habitualmente va precedido de un determinante. Así:

Le pregunté por el porqué de su ausencia.

Necesito que me aclares un porqué.
Le enumeró los porqués de su renuncia.

También cuando se usa metalingüísticamente (digamos) refiriéndonos a una pregunta que comenzaba por por qué.

La respuesta a sus porqués fue inmediata.

©Ángel Carrasco Sotos